viernes, 10 de abril de 2009

Reseñas de libros para Fantasymundo

Desde septiembre de 2008, los colegas de Fantasymundo me mandan libros gratis por la cara a cambio de escribirles una reseña para su página. Si te entra envidia, querido lector, ve y apúntate tú también.

Corsario
Tim Severin

Tim Severin es un hombre cuya biografía probablemente resulta más apasionante que cualquier novela que él mismo pudiera escribir. A sus casi 70 años ha sido explorador, periodista, autor de documentales, colaborador habitual de National Geographic y navegante de los siete mares, entre otras cosas.

A diferencia de otros muchos autores de novela histórica, Severin no sólo ha pasado guía en mano por los restos actuales del pasado que evoca, sino que se ha enfrentado, en la medida de lo posible, a varios de los retos por los que sus personajes han de pasar en sus viajes. Nacido en una India aún bajo el dominio británico, se ha dedicado durante muchos años a revivir viajes míticos usando los mismos medios de transporte de cuando se hicieron originalmente: de Irlanda a América como San Brandán, de Omán a China como Simbad el Marino, por el Caribe de Robinson Crusoe, por el Mediterráneo oriental como Jasón y Ulises en una réplica de una galera de la Edad de Bronce, a caballo por la ruta de la Primera Cruzada, también por la Mongolia de Gengis Khan, y varios otros viajes por el Pacífico, inspirados por exploradores chinos, victorianos o buscando el origen de Moby Dick. Cuando tocaba arriar velas o echar mano a un remo en su periplo por mares y océanos, Severin lo hizo en persona, y no puede encontrarse mejor preparación, ni más experimentada y documentada, para relatar la vida de un esclavo trotamundos que hoy es galeote y mañana está manipulando pólvora al servicio de su amo musulmán.

Tras haber escrito a ratos perdidos una trilogía de cierto éxito, ‘Vikingo’, a partir de 2005, ahora prueba suerte a finales del siglo XVII con este 'Corsario', publicado en versión original en 2007 y que acaba de llegar al español de la mano de La Factoría De Ideas. La historia está situada medio siglo más tarde que las novelas de Alatriste, por ejemplo. Un adolescente irlandés, Hector Lynch, es apresado junto a su hermana por corsarios berberiscos en su pueblo pesquero y vendido como esclavo. Durante los próximos meses experimentará en el norte de África una vida completamente diferente de la que está acostumbrado, y aunque no acaba de pasarlo extremadamente mal, ha de estar al servicio de sus caprichosos amos y demostrar su valía constantemente, mientras se preocupa por encontrar a su hermana.

Severin, en su afán por llevarnos por un lugar tras otro, tiene al joven Hector de acá para allá todo el tiempo, picando piedra, manipulando pólvora para cañones, remando, naufragando, trapicheando con tal o cual información y conociendo gente nueva a cada paso, un día en Argel, otro en Marsella, otro en Marruecos... El crisol de culturas, patio de vecinos y charco de rencores y venganzas que siempre ha sido el Mediterráneo aparece explorado y retratado en todo su vigor de mezcolanza de lenguas, gentes, religiones, barcos y mercancías (éstas a veces humanas). Una mezcla tal que a veces confunde al propio autor, que llama ‘chevalier’ a un español y que parece creer que la ‘lingua franca’, en la que los vecinos de dicho patio medio se entendían, era una lengua de verdad, con gramática y todo, del estilo del esperanto, en lugar de una mezcla cambiante y sin reglas de verdad que cada uno se hacía con los idiomas que sabía y los acentos que imitaba.

Como se ha dicho, las credenciales de Severin son impecables en cuanto a experiencia directa, y probablemente le han pasado a él personalmente cosas que cualquiera diría que no quedarían fuera de lugar en una novela, pero eso no significa que tal novela, por bien documentada que esté, resulte necesariamente buena. A sus múltiples ocupaciones ha añadido la de novelista de sagas sólo recientemente, y eso se nota. 'Corsario' es una novela de aventuras, donde pasan cosas continuamente, tantas que el problema que tiene es que a cambio de sucesos continuos, los personajes no están muy desarrollados. Hector es un joven bondadoso y espabilado sin tacha que aguanta lo que le echen, hace amigos por todas partes, habla elocuentemente a buenos y malos y va negociando su paso por una situación tras otra sin mayor problema. Además, al hacerlo ser hijo de irlandés y española, educado en el catolicismo (por lo cual sabe latín y se maneja en francés), pero sin gran interés real en la religión, quizá se le hace tocar demasiados botones a la vez y se lo mantiene en una vaciedad moderna que cada lector puede llenar como quiera. Al llegar a Argel, hace amistad con un indio misquito del Caribe, también esclavo, que habla inglés porque lo aprendió para ir de embajada a Londres, camino de donde fue capturado. Hay un par de españoles por aquí, unos franceses por allá, italianos por el otro lado, bereberes, tuaregs, turcos, judíos, un búlgaro… hay veces en que parece que hay que ir tachando naciones de una lista, en nombre de ese crisol de culturas mencionado antes.

Todo esto no resulta un defecto, en realidad, ya que este tipo de relato directo de ‘lo que pasa y nada más’ es muy del gusto de muchos lectores. Lo que ocurre es que si hay unos personajes memorables, individualizados, redondeados y con matices, una novela mejora tremendamente. Si no, parecen cosas que podrían estarle ocurriendo a cualquiera, sin importar quién sea. Por el contrario, muchos detalles concretos que cuenta de la vida cotidiana a lomos de un camello o con las manos en un remo resultan fascinantes. Incluso en una novela histórica, lo que pasa de verdad resulta más interesante, y así se demuestra en las tres últimas páginas del libro, donde con el relato ya acabado Severin nos habla de los personajes y situaciones auténticos que inspiraron a sus protagonistas.

--Reseñas anteriores--

AUTOBIOGRAFÍA
Alonso de Contreras - Vida de este capitán

CÓMIC
Joan Mundet - Las aventuras del capitán Alatriste

HISTORIA
Marc Ferro - El siglo XX explicado a los jóvenes
Vendyl Jones - Los manuscritos de Qumrán

NOVELA FANTÁSTICA
Laurell K Hamilton - Seducida por la luz de la luna
Rodolfo Martínez - Sherlock Holmes y la sabiduría de los muertos
Laura Whitcomb - Entre luz y tinieblas

NOVELA HISTÓRICA
Linda D Cirino - La vendedora de huevos
Alejandro Núñez Alonso - El lazo de púrpura
Alejandro Núñez Alonso - Semíramis
Arturo y Carlota Pérez-Reverte - Las aventuras del capitán Alatriste
Tim Severin - Corsario

5 comentarios:

Eli dijo...

No te imaginas hasta que punto me das envidia, Ro.
Ya me gustaría poder participar más pero es que últimamente tardo en leer un libro casi un mes, y eso arañando minutos a las horas de sueño.
Además, esto ya lo he dicho antes, para mí escribir significa un auténtico acto voluntad en el que dejo los higadillos a base de pensar, corregir, volver a pensar, descartar,desesperar y resignarme.
Por eso envidio esa facilidad de palabra que tienes, esa capacidad de entresacar lo verdaderamente importante del texto, el análisis exhaustivo y el toque de humor.

De momento, me conformo con leer tus reseñas. Pero prometo apuntarme de nuevo si el futuro se me presenta más claro.
Besos!!!

Eli dijo...

Vale, no sé si te molan los premios blogueros, pero por si acaso...¡estás nominado!

Pásate por mi blog.

Lenka dijo...

Ostras, la de libros que me tengo que apuntar!!!!

Jejeje, yo tampoco sé si te molará esto de los premios amistosos (igual te parece una ñoñería, so cazurrazo), pero en mi blog también tienes uno.

;)

Cris dijo...

Gracias por las reseñas. Más libros para la lista, jejeje.
Por cierto, en mi blog, también tienes un premio.
Besos.

Rogorn dijo...

Aiss, Lenka, no me llames cosas bonitas, que me ruborizo.

Supongo que ahora me toca pencar tras liar continuamente a la peña para hacer quedadas y amigos invisibles. Así que dada la deuda, la presión de grupo y el salero y guapura de las premientes, pasaré por el aro. A mi manera.

Sobre los libros, quede claro que no los recomiendo (necesariamente). Excepto los que llevan la palabra 'capitán' en el titulo, los he leído por compromiso voluntario, pero leed la reseña (incluso entre líneas) en vez de fiaros sólo de que estén en la lista.

Eli, aunque sólo puedas uno cada bastante tiempo, es uno menos que tendrán que encalomarle a alguien. Y así se lee de gente diferente también.

Gracias a las tres por los premios.