
Pero ahora se acabó. Ni así se está ganando lo suficiente, sobre todo si se quiere hacer un periódico que no se limite a regurgitar noticias de agencia o a citar como base lo que dicen los medios públicos como la BBC. Así que se quiere volver a lo de siempre: el que quiera leer lo que ha pasado, que pague por ello, que de eso viven los que lo escriben, imprimen, reparten, venden y cuelgan en la red.
El asunto se está siguiendo con bastante interés en todo el mundo, ya que todos los demás periódicos están planteándose si hacer lo mismo o no. El New York Times ya ha dicho que va a hacer pasar por caja pronto. Hay quien piensa que la gente simplemente se pasará a otro lugar donde pueda leer las noticias gratis, y si ese empieza a cobrar a otro, y así sucesivamente hasta que quizá lo único que le quede sea lo que pone su portal de correo, por ejemplo. O Wikipedia, que también tiene sección de noticias diarias. Otros creen que los lectores se darán cuenta de que la calidad cuesta y habrá el suficiente número de paganinis para que el sitio de pago sea viable, e incluso siga atrayendo anunciantes. El Financial Times, por ejemplo, lleva años siendo de pago y les va bien, aunque lógicamente tienen un tipo de clientela muy específica que se puede permitir el gasto, y para quien además leer novedades cada 24 horas es tardar demasiado. Si un mercado estornuda a las tres de la madrugada y tú no te enteras hasta dos días después, será demasiado tarde.
El tema se extiende además a todo lo que se puede obtener en internet, sobre todo ilegalmente. A través de perder (corrijo: "dejar de ganar", que no es lo mismo) miles de millones, la industria de la música, el cine y la imprenta se ha visto obligada a espabilar y a buscar maneras de cobrar menos por sus productos a cambio de reducir gastos de producción y transporte. Dejar bajarse una canción directamente a tu ordenador genera muchos menos gastos que tener que grabarla en una cinta o disco, transportar esos soportes a lugares donde se puedan adquirir y pagar a todos los involucrados en el proceso, y eso debe reflejarse en el precio. Vale, ya no te cobro 20 euros por un cedé. Pero tampoco puedo dejar que la gente se lo lleve todo gratis. Así que a cambio de buscar un sistema ágil, barato y/o con publicidad añadida, voy a ver si te convenzo de que si disfrutas de todo esto, es justo que algo tengas que pagar por ello, que a a ti tampoco te gustaría no cobrar por tu curro. Y así está básicamente la cosa. Cruzando los dedos para que la gente acepte de buen grado soltar un poco de caridad. A ver qué pasa.
--
Por si a alguien le medio interesa, el paywall del Times significa que ya no estoy más de reportero futbolero coñazo. El blog de fútbol ha pasado a ser de pago también, y ya sólo está para los autores profesionales. Durante el Mundial, todo Dios estaba escribiendo sobre lo mismo, así que la cosas estaba bastante saturada, y además, debido al éxito del fútbol español, ya parecen haber fichado a un especialista de primera división, Guillem Balagué, para largar sobre el balompié patrio. De forma que no creo que me publiquen nada más, así que paso. Total, tampoco pagaban, jeje.
2 comentarios:
Pues ellos se lo pierden, hombre ya!
Y vosotros os lo perdéis también, jeje.
Publicar un comentario